Desindustrialización: Una visión de la economía brasileña

Resumen

A pesar de ser un tema estudiado a nivel mundial, todavía hay pocos resultados en la literatura sobre las investigaciones realizadas sobre la desindustrialización en Brasil. El país experimentó dos crisis en el período comprendido entre 2001 y 2018, la primera en el bienio 2008-2009, cuando hubo una recesión en 2009, y la segunda en el bienio 2015-2016, con recesiones en 2015 y 2016. En promedio, en estas casi dos décadas, el Producto Interno Bruto (PIB) brasileño creció 2,3% anual en términos reales, mientras que la expansión del PIB per cápita fue de 1,2%. Luego, en 2020, la pandemia de COVID19 sacudió las economías mundiales, y el pronóstico de Brasil de una caída en la participación del PIB es del 5,8% según estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), donde el pronóstico inicial sería de alrededor del 9,1% considerado como el más grande en 120 años. La producción industrial brasileña ha caído desde la década de 1940. En el país, el término desindustrialización se ha utilizado desde la década de 1970 para justificar la pérdida relativa de empleo industrial; en 2020, esta estimación es de alrededor del 13,4% y puede aumentar en 2021 con una previsión de alrededor del 14,1%. Este estudio exploratorio analizó el fenómeno en las empresas manufactureras, a partir de datos de la Confederación Nacional de la Industria, utilizando el Índice de Desarrollo Humano (IDH), el Producto Interno Bruto (PIB) y el Índice de Desempleo como base para cada producto estudiado. Los resultados muestran una caída en la producción industrial de los sectores estudiados, en Brasil, desde 2005, principalmente el sector metalúrgico, apuntando a un escenario de desindustrialización.